23 fevereiro, 2009

Café Para Noches Monocromáticas...




Puede ser café regular o puede ser el café de tu noche monocromática. Siéntete alentado o desalentado, en ti crece la capacidad de jugar con los colores y con el sabor de la noche. Hoy es noche monocromática, mañana seguro puede ser multicolor. Dale rienda suelta a tus instintos, no te fijes mucho en el sabor, tal vez mañana cambie tu antojo y podrás elegir algo mucho mejor.

Café con leche, café con pan, café con azúcar, café con amor, café con caricias, café de ti y de mí. Necesitamos café para las noches donde sí existimos y también en las noches que no nos encontramos, así bien podremos inventarnos. Inventarnos con ropa o sin ropa, yo entre tus brazos o tú entre mis piernas; suaves tus brazos y suaves mis piernas. Aprovecha para fundirnos y quitarme la pena, dame una taza de cafeína mientras me besas. Riega gotitas de este líquido singular por todo mi cuerpo, dibuja entonces con tu lengua, acaricia con la yema de tus dedos y une mis pecas para encontrar la magia. Derrama café en mis labios, seguro ahí querrás probarlo, no permitas que te confundan mis lunares ni distraigas tu atención, esta noche dedicala a mí solamente y quizás al café también.

Con una mano sostengo la taza, con la otra endulzo tu cuerpo, tu piel contrasta con la mía y eso despierta en mi cierta armonía. El café fue detonante de nosotros, nos encontramos en el mismo mundo compartiendo la magia del café y así entendí que compartir un café contigo sería compartir un instante de mi vida. Compartí mis secretos y me invente algunos no tan ciertos.
Un par de tazas de placer y damos rienda suelta a la locura, jugamos con las noches y desafiamos al sol a salir antes del amanecer, le pedimos un día de oscuridad y que se vaya a descansar, le invitamos un café y nos vamos a bailar. Bailamos canciones lentas, nos acercamos un poco más, respiramos café por un segundo.

Apaga la luz, me gusta la oscuridad, déjate guiar por el aroma dulce-amargo en mi cuerpo. Recórreme y, de vez en vez, detente, prueba los sabores de mi piel. Toma los granos de café que están junto a la cama y dibújame en las sábanas con ellos. Prometo quedarme quieta aunque tal vez no pueda resistirme a acariciar tu pecho, será el único movimiento y la única negación. Ya sólo nos quedan un par de horas, no quiero volver a fundir café con sudor, quiero que miremos el cielo y averiguemos cuál es su sabor.




NOTA IMPORTANTE!! NO COMPARTO MI CAFÉ ¬¬
y ya sé que digo mucho café y que soy chafa ¬¬

These words I write keep me from total madness